Francisco Romero marca goles con los más grandes de La Academia

Francisco Romero es atacante de la Sub 16 

En la Sub 16 atlética hay un gigante fortachón que en ataque hace estragos. Impresiona por su porte y lo llaman el alemán, pero por su fisonomía y nombre nunca puede pasar por teutón. Pero si uno lo ve jugar, recuerda a aquellos atacantes implacables de la mannschaft como Oliver Bierhoff o Gerhard Müller. Se llama Francisco Romero. Es un joven delantero que ha anotado tres goles vistiendo la camiseta azul del Atlético y ha jugado durante el torneo nacional 291 minutos sobre el rectángulo.
 
Los tantos de Romero han contribuido fundamentalmente para que su equipo mantenga el invicto en la competencia. Su inolvidable anotación en el último segundo de juego ante Los Arcos, marcó la celebración en un partido muy intenso, electrizante y reñido.
 

El delantero se formó en el fútbol alemán

En la tierra de la unidad, justicia e igualdad
Francisco Romero nació en Caracas el 12 de marzo de 1999. Su alias, “El Alemán”, es un apodo que se ganó cuando al ingresar a las filas de Atlético Venezuela, relató su experiencia personal en el extranjero a sus compañeros.
 
Su travesía inició en 2011, cuando su familia se tuvo que trasladar Alemania, a la localidad de Krefeld (población ubicada a 22 kilómetros de Duisburgo, en el Oeste del país) debido a una afección muscular que tuvo su hermano en su pierna izquierda a la edad de cinco años y que fue tratado con células madre.
 
Estudió en Krefeld e ingresó a las inferiores del SC Bayer Uerdingen 05 (Actual KFC Uerdingen 05). Destaca esta divisa en su palmarés, la obtención de una DFB Pokal (Copa de Alemania) en 1985 y en el plano de internacional  llegó a semifinales en 1986 de la vieja Recopa de Europa y jugó la Bundesliga 1 por última vez en 1995.
 
El fútbol alemán le abrió las puertas a Romero y pudo desarrollar con pasión el deporte que tanto ama desde que tiene uso de razón. “Al principio no me costó porque principalmente era jugar, pero luego las cosas se complicaron por el idioma, pero poco a poco lo dominé y hablé normalmente. El fútbol alemán es muy metódico y disciplinado, y eso lo aprendí muchísimo de ellos”, recordó.
 
“Allá me impresionó mucho el orden en las calles, las escuelas y en todos lados. Los alemanes son muy sobrios y serios. Durante el año nuevo no se lanzan como aquí a felicitarse, sino que lo hacen un poco secos y las canciones parecen que fueran todas de cumpleaños”, relató el pícaro Francisco entre risas, sobre la gente y las costumbres alemanas.
 

Romero aprendió la disciplina del balompié en suelo teutón

Regreso a la patria
Arribó nuevamente al país en 2013, volvió a su rutina escolar e hizo vida futbolística en la Academia Venezolana de Fútbol antes de ponerse la camiseta azul sobre su pecho por primera vez.  “Me dio mucha curiosidad ver el trabajo de Atlético Venezuela y decidí probar. Estaba muy nervioso porque pensé que no iba a quedar, pero gracias a Dios quedé; ahora estoy muy feliz con lo que he hecho. Sé que apenas el torneo está comenzando, y todavía nos falta mucho, pero quiero seguir echándole muchas ganas y dar todo mi esfuerzo para hacer goles en beneficio del equipo”.
 
Romero es autocrítico y lo asume como adulto: “Sé que tengo cosas que mejorar, como mi velocidad y el arranque para tener mejor reacción a la hora de buscar la pelota. Corrigiendo poco a poco quiero salir campeón Sub 16, subir de categoría y llegar a jugar en Primera División y cómo no, también vestir la camisa vinotinto”, reflexiona el polivalente delantero con sus aspiraciones y sueños en su afán de continuar una larga trayectoria dentro de la institución.
 
En marco de su preparación antes de cada encuentro, Romero tiene un ritual: “Antes de salir de mi casa rezó una oración junto a mi mamá, para que las cosas salgan bien en el encuentro y este concentrado durante el mismo. Cuando entro a la cancha, miro hacia arriba y oro para mi abuela que está en el cielo”, expresa con humildad un personaje que se lleva muy bien con cada uno de sus compañeros, que extiende una mano amiga a todo el que lo necesita y confía plenamente en Dios y en su familia. Una larga carrera futbolística que apenas está comenzando le espera al “alemán” Romero.

El cancerbero de la Sub 14 celebra su gol de arco a arco

Javier Viloria, el cancerbero goleador Sub 14

La mañana apareció en el cielo sabatino y con ello el fin de los bostezos. La Academia se concentró en medio de bromas, consejos y la preparación de cada detalle, para que los chicos estuvieran cómodos y en plena condiciones en su primera visita fuera de los límites del Centro de Entrenamiento.
 
Ser consistentes y persistentes en su estilo de juego, fue el norte de la embarcación que se dirigió a La Dolorita para enfrentar al Deportivo Petare. El máximo esfuerzo en el desmarque y en la gloriosa anotación fueron las máximas, para obtener un resultado positivo y no regresar con las manos vacías.
 
Cerca del equilibrio
 
La Sub 12 atlética mostró de primera mano que no se iba a dejar intimidar y menos con una diana en contra local. El espíritu de los chicos se llenó con el deseo de equilibrar la partida y Arick Betancourt no dudó en ningún momento de liderar el ataque y empezar a generar ocasiones importantes.
 
Iverson González y Gabriele Iula, acechaban con chispa y peligro a la defensa parroquial,  el vendaval ofensivo no cesó, a pesar que la oncena rival quiso aumentar distancias. No obstante, la Sub 12 siempre fue sumamente inteligente y buscó los espacios necesarios para aprovecharlos oportunamente.
 

Gabriele Iula, brilló en el lateral Sub 12

La segunda parte, siguió al pie de la letra el guion del primer tiempo del juego nacional, pero con el transcurso de los minutos, la insistencia en territorio enemigo no tuvo fruto y Petare no dio señal alguna de permitir en su casa de dejar el escapar triunfo.
 
Inexpresivo tratado
 
Con una rápida apropiación del esférico, la Sub 14 se lanzó en agobiar al adversario y permitir que el capitán Diego Galaviz, registrara su tanto al minuto seis. En consecuencia, los petareños se motivaron, emparejaron el cotejo y el panorama se puso sumamente complejo para romper el hilo del partido.
 
El cancerbero nacional Javier Viloria se convirtió en protagonista y no necesariamente por sus grandes estiradas: fabricó un golazo que clavó al fondo de las telarañas petareñas. Toda una gesta épica de arco a arco que sin lugar a duda fue la nota llamativa de la tarde.  “Estoy muy contento y asombrado a la vez por lo que hice. Quise sacar de meta hacia la delantera, pero esta vez le pegué tan fuerte que fue a parar a la otra arquería, y sin darme cuenta anoté bajo la felicitación de todos”, destacó atónito.
 
Con la ventaja en la pizarra, las filas nacionales se enfocaron en pararse bien y evitar a toda costa la incursión enemiga. Pero lamentablemente casi al finalizar el enfrentamiento, el tanto de Montiel desvaneció la victoria, a pesar del gran esfuerzo de Viloria en evitarlo. “No me esperaba que me anotaran así. Lamentablemente, el lateral izquierdo no llegó a tiempo y no pude detener ese tiro”.
 
“Tuvimos muchos problemas defensivos y en ciertos momentos nos desesperamos en el ataque, pues no se tocó el balón lo suficiente y a pesar de que la cancha es muy pequeña, abusamos mucho del pelotazo”, indicó Viloria.
 
Esta situación no desanimó al equipo y sin lugar a dudas, el arquero alabó la actuación de sus camaradas que dieron el máximo esfuerzo en obtener un saldo positivo frente a Petare. “Galaviz estuvo brillante con su gol, y no tengo nada que reprochar nada a mis compañeros, todos estuvieron muy bien y demostramos hoy que tenemos mucha fuerza y coraje”, concluyó el joven cancerbero.
 
Triunfo magnífico
 
La Sub 16 saltó al rectángulo de juego con sumo optimismo, pero durante los primeros 40 minutos el plantel no generó un nivel futbolístico adecuado para vulnerar la defensa parroquial. Los jugadores se fueron así al descanso y el profesor Henry Meléndez no dudó en ajustar la maquinaria nacional.
 
Los cambios hicieron su efecto, una sustitución por lesión de Roberto Terrasi (que se recupera sin contratiempos de su lesión en una de sus costillas) por Jhonaiker Suárez, no perturbó anímicamente al grupo y con fiel apego a recuperar su estilo, el ataque se activó nuevamente.

Jhonaiker Suárez hizo doblete ante el Petare Sub 16 

Fue solo cuestión de tiempo para que Jhonaiker Suárez en dos acciones consecutivas que sólo distan entre sí de dos minutos, firmara doblete de goles y reflejar así la superioridad en la cancha, que Francisco “El Alemán” Romero, convirtió en goleada al 77’.
 
Ante este panorama en el cual la Sub 16 mostró dos caras de la moneda, el mediocampista declaró su visión de cómo se mejoró la disposición para afrontar este reto que dejó un buen sabor de boca: “Tuvimos un primer tiempo muy difícil y se tuvo que acomodar eso. Esto permitió que en la segunda parte, fuéramos más participativos en el ataque y poder conectar así los goles”, expuso el jugador.
 
“Considero que no nos faltó nada en el encuentro de hoy, solo hay que mejorar el posicionamiento táctico y tocar más la pelota”, señaló Suárez sobre los fallos que presentó la Academia en el desarrollo de un partido sumamente pesado y de gran desgaste, por las altas temperaturas presentes en el escenario sintético.
 
Sobre sus compañeros, el medio no desperdició elogio alguno a todos los elementos que hacen vida en el conjunto nacional y demostraron en la parte suplementaria, el mejor nivel desde que inició la competición. “Hicimos cada uno un gran esfuerzo, le pusimos mucho corazón y sacrificio que nos permitió ese lavado de cara, ese cambio de actitud que se reflejó en el marcador final”.
 
A pesar de venir del banquillo, el jugador no mostró señal alguna de preocupación. Solo quiere seguir aportando su experiencia y su garra cada vez que se pone su camiseta del Atlético Venezuela. “Quiero seguir luchando cada día para dar lo mejor de mí y para el beneficio de todos”, concluyó sencillamente Suárez, ante el objetivo de ser uno solo, como espíritu de todo gran equipo.
 
Tras conseguir cuatro puntos en su incursión visitante, las categorías Sub 12, Sub 14, y Sub 16 dirigidas por Henry Meléndez, regresan a casa a seguir ajustando los detalles técnicos en la plantilla, y así obtener ante Pacairigua FC los resultados necesarios para seguir en el sendero de la clasificación a la próxima fase como principal objetivo en esta temporada.

Diego y Jairo golean en la Sub 20 y el filial respectivamente

Diego y Jairo brillan en las filas del cuadro nacional

El mundo del fútbol es más pequeño de lo que parece y eso se refleja en la familia Cárdenas – Otero, que crió cuatro futbolistas de gran calidad humana y deportiva. Tres de estos hermanos ya juegan a nivel profesional, en tanto que el otro, está a un paso de lograrlo. Dos de ellos defienden la camiseta del Atlético Venezuela cada fin de semana: Diego Cárdenas en la Sub 20 y Jairo Otero entre el primer plantel y el filial.

Jairo Otero ha sumado cinco dianas con el filial

La vida los hizo hermanos

Por distintas situaciones en la vida, las familias Cárdenas – Otero se juntaron para criar a cuatro chamos que a la postre se convertirían en grandes jugadores. En una casa cuyo padre es Horacio “El Chango” Cárdenas, el fútbol fue la primera herramienta al momento de formar a estos futbolistas que podemos ver en acción cada fin de semana en sus diversas categorías.

Junto a Jairo y Diego, están otros dos hermanos: Horacio Cárdenas quien juega en Tucanes de Amazonas y Rómulo Otero, jugador del Caracas FC y la Selección Nacional. Ellos cuatro aplicaron lo aprendido por su padre en una escuela de fútbol que él mismo manejaba en la ciudad de El Tigre y la cual se llama San Tomé.

“El Chango”, tiene un vínculo particular con el Atlético, ya que Nerio Hernández, actual asistente técnico del primer plantel, lo dirigió en su época de futbolista y hoy es uno de los veladores del desarrollo deportivo de dos de sus hijos.

Además de Horacio, Jairo, Diego y Rómulo, esta familia cuenta con una figura femenina llamada Marilyn Cárdenas, quien al igual que sus hermanos, es una apasionada por el fútbol, deporte que sigue por tradición familiar y que también practica.

Diego Cárdenas comanda el mediocampo nacional Sub 20

El orgullo de un hermano mayor

Jairo, delantero de 20 años que se ha formado en el cuadro nacional, ya sabe lo que es celebrar sus tantos en Primera División y en el filial, donde es el máximo artillero con cinco tantos en diez partidos disputados por el Atlético B en Tercera División.

Para él, es un orgullo ver que puede compartir con Diego a diario y puede seguir de cerca su crecimiento como jugador. Esto, ha sido un punto extra de motivación en el accionar del fornido atacante. “Me siento muy bien en el club, es una alegría saber que Diego está aquí formándose como jugador y más por estar como goleador en la Sub 20. Es bueno tenerlo cerca y que podamos compartir en el equipo”.

Tres de los cuatro hermanos, ya han sumado dianas en la máxima categoría del fútbol venezolano y eso es algo que llena de orgullo a todos en casa. “Para nosotros es una motivación saber que hemos estado en Primera. Para Diego también lo es, ya que trabaja fuerte para lograrlo; para nuestro papá es una alegría ver lo que hemos logrado y para este tipo de cosas es que nos hemos formado”, señaló Otero.

Desde muy chamos, los hermanos Cárdenas – Otero, se imaginaban estando juntos en un mismo camerino, hoy en día, Diego y Jairo viven esa alegría. “Desde chiquitos siempre hemos querido que esto pasara. Diego estuvo en Mineros y ya está aquí en el Atlético donde compartimos juntos esa pasión de jugar fútbol”, añadió el goleador.

Tres de los cuatro hermanos hacen vida en la capital, en tanto que el otro juega en Puerto Ayacucho, pero esto no es un impedimento para que la familia se mantenga unida y pendientes unos de los otros. “Siempre estamos en constante comunicación y más sabiendo que él (Horacio) está tan lejos. Es una alegría saber que pudo hacer un gol este fin de semana y es algo que nos motiva a todos para seguir luchando por lo que queremos”, comentó el delantero nacional.

Para Jairo, es una satisfacción ver el crecimiento de Diego que ya está a un paso de saltar al fútbol profesional. “Nuestro papá se siente muy feliz al vernos triunfar en esto que tanto nos gusta hacer. Para él (Diego) es una motivación más ver que es al que le falta llegar a Primera y sé que tarde o temprano lo logrará”, culminó.

Siguiendo los pasos de sus hermanos

Para este nuevo año, llegó al Atlético Venezuela Sub 20, un talentoso mediocampista llamado Diego Cárdenas, procedente de Mineros de Guayana, y que con su exquisita pegada, se ha sabido ganar la confianza del cuerpo técnico. Tras nueve fechas disputadas en la Serie Nacional, el volante se ha ejercido como máximo goleador de su categoría con cuatro tantos.

El canterano, se ha mostrado satisfecho con sus inicios en esta institución y más al saber que comparte con uno de los suyos la alegría del trabajo diario. “El fútbol es mi vida y desde que tengo uso de razón ha sido así, es algo que mis padres me enseñaron a querer y ahora con la alegría de ver que puedo estar aquí junto a Jairo”.

Otero, fue uno de los principales factores para que Diego se sumara a las filas del Atlético Venezuela. “Hace dos años me había dicho que me viniera para acá cuando estaba en Mineros, pero ya estoy aquí dando lo mejor de mí para que esta institución salga adelante y para yo seguir creciendo como jugador”, aseveró Cárdenas.

Diego trabaja con la mente puesta en convertirse en futbolista profesional al igual que sus hermanos, y ve como un punto a favor, poder compartir con dos de ellos a diario. “Para mi estar con la familia es lo mejor, siempre lo he dicho, una de las cosas que más me gusta es estar con mi papá, con mis hermanos, con mis primos y compartir todos juntos. La familia siempre motiva para hacer las cosas lo mejor posible”, sostuvo.

El mediocampista se ha sentido bien en el Atlético, ya que ha encontrado un material humano de gran calidad, aparte de la compañía de Jairo. “Trabajo para cumplir mis metas y seguir adelante en el fútbol, es una motivación ver como Jairo, Rómulo y Horacio se han acentuado en la Primera División y doy lo mejor de mí para llegar a ese nivel”.

Ambos hermanos se han ejercido como goleadores de la Sub 20 y el filial, motivo que les invita a seguir dando lo mejor para conseguir las metas trazadas al inicio de la temporada. “Debemos seguir trabajando para que se nos sigan dando las cosas y los goles. La idea es dar siempre alegrías al equipo consiguiendo victorias y siempre dar lo mejor de nosotros”, culminó Cárdenas.

Diego y Jairo, continúan trabajando con la mirada fija en seguir creciendo y mejorando día a día y así llenar de orgullo a un hogar que siempre vela por el bienestar de sus futbolistas, a quienes les han salido bien las cosas por su buena preparación y la humildad que los caracteriza dentro y fuera de las canchas.

La Cantera sumó cuatro de seis puntos ante Petare

La Cantera de Atlético Venezuela sumó cuatro puntos vitales en su lucha por culminar el Apertura en puestos clasificatorios. La Sub 18, consiguió un empate con sabor a derrota, ya que los nacionales demostraron superioridad durante los noventa minutos y merecieron un poco más, en tanto que la Sub 20 estiró su buen momento y alcanzó una remontada épica que les permite mantenerse en puestos clasificatorios.

Partido correcto

El plantel Sub 20 demostró su evidente mejoría y las capacidades que tiene para afrontar el último compromiso del Apertura ante Mineros el próximo sábado y el Clausura. Rapidez, precisión, juego colectivo y unión, fueron factores determinantes en la victoria de los dirigidos por Enrique “Kike” García.

Samuel Marquina fue la gran figura del compromiso al marcar el tanto del triunfo a cinco minutos del final. El volante se mostró satisfecho por la actuación de los suyos y confía en volver a puntuar ante el cuadro negriazul. “Tuvimos un gran funcionamiento en la segunda mitad, en la primera hubo uno que otro fallo, pero entramos concentrados y mentalizados en que podíamos sumar de a tres y así fue”, señaló.

El pasado día miércoles, sucedió algo similar al choque del sábado, Petare se adelantó en el marcador y los canteranos supieron revertir esa situación. “Ya conocíamos al rival y de lo que eran capaces, entramos un poco despistados y eso nos costó el gol, pero luego las palabras del profe (Enrique García) nos ayudaron a que en el segundo tiempo entráramos a ganar”, agregó Marquina.

El defensor, celebró su primer gol con la casaca atlética de la mejor forma posible: firmando un triunfo clave en las aspiraciones de los más grandes en La Cantera. “Estoy muy feliz, esa pelota parada siempre se practica en la semana y eso se vio reflejado en el gol. Es bonito poder marcar y seguiré trabajando para volver a hacerlo”.

Ya con el triunfo en sus manos, los nacionales pasan la página y comienzan una ardua semana de preparación en la que solo piensan en una cosa: ganarle a Mineros. “Será un partido bastante fuerte, aún nos quedan noventa minutos por jugar en este Apertura y confiamos en terminarlo de la mejor forma posible”, culminó Samuel.

Un empate que pudo ser un triunfo

La oncena Sub 18 por su parte sumó un punto amargo en un duelo que dominaron de principio a fin. La verticalidad, los pases rápidos y el juego colectivo, una vez más marcaron el gran desempeño de los dirigidos por Enrique Maggiolo, a quienes solo les faltó concretar ocasiones para salir victoriosos de Fuerte Tiuna.

Los más pequeños de La Cantera, han mostrado cosas positivas en todo el torneo y el duelo ante Petare no fue la excepción. Jugadores como Juan Dellacasa, Eduardo Dias o Juan Camilo Pérez, lograron hacer diferencias en un partido que comenzó siendo bastante cerrado, pero con el pasar de los minutos, el claro dominador fue el cuadro nacional.

El tanto de Yeangel Montero, su primero con la camiseta atlética, se dio gracias a una buena triangulación que al final permitió al delantero cabecear para batir al meta parroquial. Un penal en los últimos compases del partido impidió a la Sub 18 llevarse ese triunfo tan importante  que los hubiese ubicado en el segundo lugar de la clasificación.